TOMÁS PÉREZ, ALFARERÍA DE ALBA DE TORMES

Hablar de la alfarería de Alba de Tormes es hablar de tradición y de su principal exponente, la filigrana, una técnica exclusiva de esa localidad, declarada Bien de Interés Cultural por la Junta de Castilla y León, que consiste en superponer diversos elementos, asas y adornos fundamentalmente, a una base que conforman piezas habituales de la alfarería como platos, botijos o bandejas, y sus dibujos hechos con la herramienta tradicional, el aguamanil.

Tomás Pérez forma parte de una familia que durante cinco generaciones, desde que iniciaron la actividad alfarera en 1890, continúan elaborando piezas tradicionales totalmente artesanales y manuales, desde la extracción de la arcilla, su modelado, la decoración y la cocción.

Las mesas que hoy os presento, con la cerámica del taller de Tomás Pérez, sin tratarse de las piezas más significativas de la filigrana albense, sí que contienen algunos de sus elementos más destacados, el trabajo decorativo con el aguamanil, la precisión del artesano en el dibujo de cada plato y los colores de la arcilla y sus esmaltes.

Combinamos una misma vajilla en distintas composiciones, cambiando mantel y cubiertos, para comprobar cómo unos mismos platos pueden tener distintas presentaciones y todas ellas lucen fenomenal en nuestra mesa.

Cuando la vajilla es una obra de arte es muy fácil combinarla y hacer que destaque en cualquier situación, lo mismo con un mantel liso que con uno estampado y también con servilletas y cubiertos de distintos colores.

Es primavera y unas sencillas flores ponen alegría en estos días.

Podéis ver sus trabajos y su historia en su página web: https://www.alfareriatomasperez.es/ y en su instagram @alfareriatomasperez.