Vivir con endometriosis

Entrevista a Belén Fernández Jorge

En el día internacional de la endometriosis, hablaremos con una mujer que la padece, y nos contará su historia con ella y cómo vive.

JE FEMME: Bienvenida, Belén. ¿Cómo te encuentras actualmente?

BELÉN: Muchas gracias. Actualmente tengo momentos de subidas y de bajadas. Ahora mismo me encuentro en un momento muy bueno porque espero la llagada de un nuevo miembro de la familia, pero sigo padeciendo sus efectos.


JF: ¿Nos podrías contar tu historia con la endometriosis? ¿Cuántos años llevas sufriéndola?

B: Llevo padeciéndola desde que tenía 20 años aproximadamente.


JF: Para quien no sepa qué es, ¿podrías hacerle una breve descripción?

B: La endometriosis se produce cuando un tejido parecido al que recubre el interior del útero llamado endometrio crece fuera de él. Puede crecer en diferentes partes del cuerpo como en las trompas de Falopio, en los ovarios o en la zona pélvica, entre otras. 


Los síntomas más habituales son dolores pélvicos, sangrados menstruales abundantes, dolores en las relaciones sexuales, infertilidad, o incluso hay casos en los que no se padecen síntomas. 



Es una enfermedad que actualmente no tiene cura.


JF: ¿Cómo supiste que lo tenías?

B: Me enteré que tenía endometriosis al acudir a mi ginecóloga tras varios años padeciendo dolores menstruales a pesar de no estar en ese momento con el período. Al principio era algo puntual pero se fue repitiendo casi todos los días y el dolor iba aumentando. En ese momento sabía que algo no iba bien, que algo me pasaba, que no era normal que tuviera dolores pélvicos o para que me entendáis de una forma más simple, lo que llamamos dolores de ovarios.  


Cuando me hicieron una ecografía me vieron que tenía un endometrioma en el ovario izquierdo y de ahí los dolores que padecía casi todos los días.


JF: ¿Qué se te pasó por la cabeza cuándo el médico nombró esta palabra?

B: Lo primero que se me pasó por la cabeza fue preguntarme: “¿qué es eso y por qué me ha pasado?”, “¿hay cura?”, “¿podré tener hijos en un futuro?”.


JF: ¿Crees que cada vez más hay más conciencia sobre ello?

B: No, creo que hoy en día es una enfermedad muy sigilosa que aún no se le da la importancia que debería tener y no se habla de ello. Sí es cierto que cada vez hay más casos en las que oyes que más mujeres como tú tienen tu misma enfermedad, pero aún queda un largo camino por recorrer. 

JF: ¿Cómo es tu vida con ello? ¿Hizo que cambiaras tu forma de vivir?

B: Hay días en los que no podía levantarme por el dolor. He tenido episodios de sincopes por las reglas abundantes mezcladas con mucho dolor. 


Hizo que cambiaran mis prioridades, el plantearme cuando querría ser madre. 


JF: ¿Cómo te ha afectado, tanto a nivel personal como profesional?

B: Al principio cuando vas a la consulta y ya te dicen qué es lo que te causa tantas molestias es un momento de shock porque no lo entiendes y tienes que hacerte a la idea de que vas a vivir con ello. 


A nivel profesional me ha afectado porque mi trabajo requiere movimiento constante, soy enfermera y tengo que ir de un lado a otro, muchas horas de pie, atendiendo a los pacientes y no te puedes permitir el decir: espere un momento que no puedo moverme yo.


JF: ¿Y en tu vida sexual?

B: En mi vida sexual no me ha afectado de gran forma, sí que es cierto que hay ocasiones en las que hay más molestias o incluso dolor después de mantener las relaciones sexuales. 


JF: ¿Cuáles son, para ti, los peores síntomas de la endometriosis?

B: Los dolores constantes de ovarios. El tener que depender de medicación para poder estar sin dolor o por lo menos que lo apacigüe de tal forma que puedas seguir con tu día a día. 


JF: ¿Las mujeres que sufrís endometriosis soléis tener más problemas a la hora de quedaros embarazadas?

B: No puedo hablar por todas las mujeres que la padecen, porque hay casos en los que no les ha afectado en absoluto a la fertilidad. 

En mi caso no ha sido así. He pasado un tiempo sufriendo el ver cómo otras mujeres a tu alrededor se quedaban embarazadas y cuando en tu caso tarda en llegar ese momento o en muchos otros casos no llega es muy frustrante y más porque la gente a tu alrededor no lo entiende y te da consejos que en realidad no ayudan como las coletillas de no estás relajada, estás tensa, etc. y en realidad abarca mucho más. 



Al ver que se retrasaba ese momento volví a acudir a mi ginecóloga. Me hicieron un nuevo control ecográfico y vimos que tenía un quiste de gran tamaño en la trompa izquierda y la única opción era operarlo mediante cirugía laparoscópica. Una vez en el quirófano aprovecharon para poder ver todas las estructuras para poder mejorar ese aspecto y poder quedarme embarazada. 


Malena Ramos/ 14 de marzo de 2022

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